Los tristemente famosos spring breakers, tolerados en algunos centros de esparcimiento y diversión porque dejan una derrama económica importante, son hoy la causa principal de días de violencia que han llevado a las autoridades de Miami Beach.
La autoridad de esta ciudad turística de Florida declaró toque de queda que se impondrá desde el jueves y hasta el próximo lunes, debido a la violencia armada provocada por las muchas personas que visitan la ciudad durante las vacaciones de primavera.
De acuerdo con la disposición oficial, el toque de queda duraría desde la media noche hasta las 6 de la mañana durante 5 noches consecutivas.
La declaración de la autoridad se produce luego de un fin de semana en el que al menos 5 personas resultaron heridas en 2 tiroteos separados y un número de vacacionistas superior al habitual invadiera la isla. Durante los últimos 3 días la policía incautó 37 armas de fuego.
La ciudad declaró estado de emergencia como medida para contrarrestar los desordenes registrados durante el fin de semana. Un par de mujeres resultaron heridas de bala en un tiroteo en la popular calle de Ocean Drive, siendo canalizadas a un hospital local, y que se sumaron a 3 personas más que a primera hora del domingo fueron ingresadas por heridas de arma de fuego.
Ocean Drive y sus alrededores, albergan infinidad de bares y discotecas a donde han llegado desde hace unas semanas cientos de jóvenes que pasan sus vacaciones de primavera en esta ciudad.
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