Ante la cumbre de este jueves en París, donde una coalición de Estados que agrupa a dirigentes de toda Europa, Australia, Canadá, Japón, Nueva Zelanda, Corea del Sur y Turquía debatirán el apoyo a Ucrania y la defensa contra la agresión rusa, la secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, les ha pedido a los participantes que den prioridad a que se haga justicia con Ucrania y centren sus propuestas en la protección de los derechos humanos para todas las personas.
Callamard destaca que Rusia ha perpetrado en Ucrania todo tipo de crímenes de guerra y violaciones del derecho internacional humanitario, incluidos ataques aéreos mortales y deliberados contra la población y las infraestructuras civiles, tortura y desaparición forzada de personas ucranianas, tanto civiles detenidos como prisioneros de guerra, así como ejecuciones y homicidios de personas cautivas en Rusia.
Asimismo, Rusia ha supervisado el traslado forzoso de niños y niñas al país, además de perpetrar la supresión de las identidades no rusas y una campaña de hostigamiento e intimidación para asegurar la obediencia a las autoridades rusas en Crimea y otros territorios bajo su ocupación.
Por ello, la titular de Amnistía Internacional llama a los y las dirigentes que asistan a la cumbre que utilicen todo su poder y autoridad para poner fin a estos atroces crímenes, proteger a la ciudadanía de Ucrania y garantizar su derecho a la justicia, la rendición de cuentas y la reparación.
Más aún, les pide que se aseguren de que se escucha a las personas que se han visto más afectadas por la guerra de agresión de Rusia y que se cubren sus necesidades.
Apunta que la coalición de Estados europeos y no europeos debe reconocer que su posicionamiento en favor de Ucrania se basa en una visión más amplia en favor de la libertad y la seguridad humana de los y las ucranianos y ucranianas y de las personas de todo el mundo, basada en la promesa de la Carta de las Naciones Unidas de la Declaración Universal de Derechos Humanos. Los y las dirigentes actuales deben defender esas normas firmemente, sin temores ni tratos de favor.
Callamard precisa que en este caso, los agresores son las autoridades rusas y Vladimir Putin. Pero muchos dirigentes mundiales, desde Benjamin Netanyahu hasta Donald Trump, pasando por Xi Jinping y Nayib Bukele, están socavando activamente el Estado de derecho internacional.
Dice también que observa con alarma cómo en todo el mundo llegan al poder dirigentes cada vez más autoritarios, muchos de los cuales se sienten cómodos con el desprecio que comparten los presidentes Putin y Trump por el derecho internacional y su disposición a sacrificar la justicia y los derechos de las víctimas.
Por ello, los y las dirigentes europeos deben rechazar los dobles raseros que se han convertido en una seña de identidad de la política internacional europea, como evidencia el hecho de que no haya protegido a la población de Gaza frente al genocidio de Israel.
Añade la dirigente de Amnistía que Europa debe crear una coalición internacional diferente, más amplia y mucho más fuerte, que no sólo sea capaz de ofrecer resistencia ante las beligerantes ambiciones de Rusia, sino también de proteger los derechos humanos y el orden jurídico multilateral e internacional.
Apoyar a Ucrania exige que apliquen a todos los gobiernos el mismo rasero que a Rusia, y exige que hagan cumplir el embargo de armas a Sudán y que rectifiquen todos los casos en que se ha aplicado un doble rasero.
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