El régimen de Daniel Ortega sigue destruyendo a la sociedad civil de Nicaragua, y en esta ocasión ordenó la clausura de la organización Save the Children International, que trabajaba en el país centroamericano desde 2011, además de otras 14 organizaciones no gubernamentales.
Los decretos respectivos fueron publicados en el diario oficial La Gaceta.
Save the Children International, que tiene presencia en más de un centenar de países en defensa de los derechos de los niños, demandó su "disolución voluntaria" al igual que otra decena de sedes, varias de ellas religiosas, de acuerdo con la resolución del Ministerio del Interior.
El decreto señala que la organización internacional, con sede en Londres, dispuso la "disolución" por haber culminado sus proyectos en Nicaragua.
El gobierno de Ortega cerró en agosto de 2024 Save the Children Canadá, entidad que recibía fondos de ese país americano y desarrollaba proyectos en Nicaragua desde 2004.
Otras 4 organizaciones fueron clausuradas por "incumplimientos a las leyes" que regulan a los organismos no gubernamentales y sin fines de lucro, a quienes cierto se les ha estado obligando a trabajar en con el Estado, acaparado por Ortega.
Desde las protestas contra el régimen de 2018, en las que según la ONU perdieron la vida más de 300 personas, miles de organizaciones no gubernamentales han sido obligadas a cesar sus operaciones en Nicaragua.
Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, afirman que las organizaciones no gubernamentales y la Iglesia católica apoyaron las protestas, consideradas como un intento de golpe de Estado patrocinado por Washington.
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