Un día como hoy, 18 de agosto, pero del año 1936, España y el mundo de las letras se conmocionó luego del fusilamiento de Federico García Lorca, uno de los poetas y dramaturgos españoles más importantes del siglo XX en España quien fue víctima de la guerra civil de ese país.
Nacido en el municipio de Fuente Vaqueros, en Granada, España, en 1898, Federico del Sagrado Corazón de Jesús García Lorca inició su pasión hacia la literatura desde su niñez gracias a que su madre era profesora de escuela; en 1914 ingresó en la Universidad de Granada al tiempo que se reunía con jóvenes intelectuales en la tertulia "El Rinconcillo" del Café Alameda.
En 1919 sus amigos se trasladaron a Madrid y gracias a la ayuda del político Fernando de los Ríos, no tardó en unirse a la “Residencia de Estudiantes”, centro intelectual que acogió a figuras como Albert Einstein, John Maynard Keynes y Madame Curie, quienes influyeron en su formación; se relacionó con intelectuales españoles como Luis Buñuel, Rafael Alberti y Salvador Dalí, al tiempo que desarrolló poemas y piezas teatrales.
En 1927, García Lorca vivió una de las crisis más profundas de su vida ya que a pesar de que sus obras “Canciones” y “Primer Romancero Gitano” gozaban de éxito, se le vió como defensor de gitanos y falto de educación. Por otro lado se separó de Emilio Aladrén, escultor con el que tuvo una relación afectiva, y siguió trabajando en nuevos proyectos.
En esta época surgió la “Generación del 27”, grupo que estableció las formas de la poesía tradicional con los movimientos de vanguardia como el surrealismo y el futurismo; adscrito a este movimiento, la obra poética de García Lorca refleja un sentimiento trágico de la vida en el que la poesía, el drama y la prosa, se alimentan de obsesiones como el amor y el deseo, así como estilos como símbolos y metáforas. La música y los cantos también tienen presencia en su poesía, profundizando en el desgarro amoroso, la valentía, la melancolía y la pasión. Como dramaturgo se le considera de los mejores en el género ya que lo aborda con tono poético y encara los problemas sustanciales del existir.
En 1929, Fernando de los Ríos le propuso realizar un viaje a Nueva York, el cual aceptó viendo la oportunidad de aprender inglés y renovar su obra; En 1930 se mudó a La Habana, donde exploró la cultura y la música, y de vuelta en España, codirigió con Eduardo Ugarte “La Barraca”, grupo de teatro universitario que representaba obras teatrales del Siglo de Oro por varias regiones de España. En 1933 García Lorca recibió la invitación de Lola Membrives para el estreno de su obra “Bodas de sangre” en Buenos Aires, con un gran éxito, por lo que se quedó en Argentina y consiguió su independencia económica.
Cuando Federico volvió a su país en 1934 terminó obras como “Yerma”, “Doña Rosita la Soltera” y “La casa de Bernarda Alba”, su obra maestra; sin embargo, en esta época España empezó a vivir una época de violencia que desató la Guerra Civil y los embajadores de Colombia y México, previendo que García Lorca fuera víctima de un atentado por su puesto como funcionario de la República, le ofrecieron un exilio que rechazó; nunca se afilió a ninguna facción política ni se alejó de sus amigos.
El 16 de agosto de 1936 la Guardia Civil lo detuvo al acusarlo de ser espía ruso; después de dimes y diretes en torno a la fechas de su muerte, Federico García Lorca fue fusilado a las 4:45 de la madrugada del 18 de agosto en un camino de Víznar a Alfacar, en Granada.
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