Fue hace 60 años que apareció por primera vez el famoso “teléfono rojo”, aparato utilizado como medio de comunicación directo entre los líderes de Rusia y Estados Unidos, en tiempos de la tristemente célebre Guerra Fría.
La efeméride ocurre en medio de enormes tensiones entre ambas potencias nucleares, como no ocurrido desde hace décadas y con potencial de destrucción mayor.
En Rusia se le llamaba Sistema de Comunicación Directo Cifrado, creado en 1963 luego de la Crisis de los Misiles de Cuba.
Desde entonces, funciona las 24 horas del día, aunque seguramente ya no se usa. Los actuales líderes no tienen la visión suficiente para utilizarlo en estos días y frenar el conflicto armado en Ucrania.
Desde su creación, los dirigentes de Rusia y Estados Unidos lo utilizaron cuando el asesinato de John F.Kennedy, los conflictos entre Israel y los países árabes, la invasión soviética de Afganistán o la Guerra del Golfo por citar algunos hechos.
El teléfono rojo fue la alternativa a los problemas de comunicación que había entre los mandatarios de las 2 potencias
La línea directa fue creada con la firma en Ginebra el 20 de junio de 1963 de un memorándum sobre comunicaciones entre el Kremlin y la Casa Blanca.
El veloz zorro marrón saltó sobre el lomo del perro perezoso 1234567890". Este fue el primer mensaje enviado desde Estados Unidos a la URSS el 30 de agosto de 1963 .
Aunque fue Kennedy fue el primero en enviar un mensaje en 1963, la primera conversación directa se produjo en junio de 1967 durante la Guerra de los Seis Días, a iniciativa del presidente estadounidense, Lyndon Johnson, que llamó al primer ministro soviético, Alexéi Kosiguin.
El teléfono rojo fue, en realidad, un telégrafo-teletipo que enviaba mensajes encriptados por un dispositivo japonés que utilizaba un algoritmo único. Los mensajes eran enviados a través de la ruta Moscú, Helsinki, Estocolmo, Copenhague, Londres y Washington, lo que obligó a tender un cable submarino especial a través del Atlántico, que sería reemplazado recientemente por fibra óptica.
Este teléfono se convirtió en símbolo de la Guerra Fría y la mayor esperanza de evitar una Tercera Guerra Mundial y la destrucción mutua asegurada.
Los presidentes ruso, Vladímir Putin, y estadounidense, Joe Biden, se reunieron por última vez en junio de 2021 en Ginebra en medio de las tensiones por el despliegue de decenas de miles de tropas rusas en la frontera con Ucrania.
Ambos mandatarios hablaron por teléfono el 12 de febrero de 2022 entre rumores sobre una inminente intervención militar en Ucrania, lo que no evitó que Putin ordenara 12:días después la campaña militar contra el país vecino.
A 60'años de la creación del teléfono rojo, la amenaza nuclear sigue latente, y .
Putin y Biden no han vuelto a usarlo, aunque cada vez son mayores los llamados en el mundo para el cese de las hostilidades y un arreglo pacífico del conflicto.
Historiadores y expertos coinciden en que, desde que comenzó la guerra en Ucrania, las comunicaciones entre mandatarios, diplomáticos y militares de ambas potencias son aún menos habituales que en tiempos de la Guerra Fría.
Mijail Gorbachov y su homólogo, Ronald Reagan, ambos fallecidos, conversaron a través de esa línea en varias ocasiones, comunicación que allanó el camino para el fin del antagonismo entre la Unión Soviética y Estados Unidos.
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