Este dirigente israelí de plano se limpia con los derechos humanos...
El ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, defendió su labor al frente de los penales, y dijo en su cuenta de X que “uno de los principales objetivos que me he fijado es empeorar las condiciones de los terroristas en las cárceles”.
Según Ben Gvir su trabajo se concentra en reducir los derechos de los presos “al mínimo exigido por la ley”, y afirmó que “todo lo publicado sobre las abominables condiciones” de los presos es cierto, en alusión a los abusos denunciados por los reos y por organizaciones humanitarias, entre los que se encuentran torturas en la prisión de Sde Teman, en el desierto del Néguev.
Las declaraciones del tambien líder del partido ultra Poder Judío se enmarcan en el cruce de críticas entre autoridades israelíes a raíz de la liberación de Mohamed Abu Salmeya, director del hospital Al Shifa de Gaza, el más importante del enclave.
Abu Salmeya fue detenido por el Ejército en noviembre para ser interrogado por las actividades de Hamás en el hospital, y denunció haber sufrido “torturas severas” y agresiones diarias en prisión, además de señalar que algunos presos han llegado a perder hasta 30 kilos por la falta de comida
La liberación de Abu Salmeya provocó polémica entre los ministros del Gobierno de Benjamín Netanyahu, que criticaron con Ben Gvir la decisión, atacando al Shin Bet y al Ministerio de Defensa.
El servicio de inteligencia interior israelí se defendió de las acusaciones culpando a Ben Gvir de no aumentar el número de prisiones a pesar de haberlo demandado durante un año, lo que provocó la falta de plazas en los centros penitenciarios y la liberación de palestinos presos como Abu Salmeya.
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