Violentos enfrentamientos ocurridos este viernes entre manifestantes palestinos y Policía israelí en la explanada de las mezquitas en Jerusalén Este, ha dejado un saldo de al menos 150 heridos y cientos de detenidos.
De acuerdo con el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel, los disturbios habrían estallado luego de que varios encapuchados aparecieron en el lugar con banderas de la Autoridad Nacional Palestina y de Hamás, y empezaron a lanzar piedras contra una de las puertas de la explanada.
El director de la mezquita de Al-Aqsa, Omar al-Kiswani, condenó la manera como los agentes ingresaron al sitio, interrumpiendo el rezo de los fieles y disparando balas de goma y granadas.
Al-Kiswani asegura que Israel "ha cruzado una línea roja", con este acto, aunque la Policía israelí niega tales hechos y asegura que ningún agente llegó a entrar en la mezquita.
Los enfrentamientos se producen en un momento especialmente delicado, ya que este año El Ramadán coincide con la Pascua judía y la Semana Santa cristiana, en una semana en la que han tenido lugar varias redadas israelíes en Cisjordania ocupada.
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