Luego de los graves incidentes de estos días la zona colombiana de Catatumbo localizada en la región noreste del país sudamericano, donde al menos 40 personas perdieron la vida, el canciller Luis Gilberto Murillo, anunció que el Gobierno de Gustavo Petro llevará al Consejo de Seguridad de la ONU los crímenes de guerra cometidos por el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Murillo dijo en un comunicado oficial, que "la próxima semana en la ciudad de Nueva York, abordaremos estos hechos en nuestra participación en la sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, donde se presentará el más reciente informe trimestral de la Misión de Verificación, cuyo mandato incluye tanto la implementación del Acuerdo Final de Paz de 2016 como el monitoreo y la verificación del cese al fuego con el ELN"
La sesión está programada para realizarse la próxima semana en Nueva York, abordará el último informe de la Misión de Verificación de Naciones Unidas en Colombia.
El documento contiene los avances y desafíos en los procesos de paz que encabeza el Gobierno de Petro, así como los actos de violencia cometidos recientemente en el Catatumbo, una de las regiones más afectadas por el conflicto armado.
Para Murillo, las acciones del ELN representan un grave obstáculo para la paz, señalando que "estos crímenes son un golpe al anhelo de paz de la sociedad colombiana, que este Gobierno ha interpretado plenamente y trabajado de manera incansable por lograrlo".
El canciller ezptreso su pesar porque el ELN ignoró los llamados internacionales para avanzar hacia un cese al fuego verificable, con un gobierno como el de Gustavo Petro, en el que as negociaciones con el Ejército de Liberación Nacional han tenido un papel central en su política de paz total desde 2022
El mandatario izquierdista reactivó los diálogos en noviembre de ese año terminando con más de 3 años de suspensión por parte del Gobierno derechista de Iván Duque, con el fin de lograe un acuerdo para desmovilizar a ese grupo armado, el segundo más grande de Colombia después de las FARC.
Las mesas de negociación se han efectuado en Venezuela, Cuba y México, con un enfoque en el cese bilateral del fuego y el desarrollo territorial como base para la reconciliación, pero la guerrilla ha trastocado en varias ocasiones las pláticas con sus acciones bélicas.
