Para el primer ministro israelí, presunto crlmal de guerra, es buena idea apropiarse de territorios que no le pertenecen, mas aún si hay quien lo haga por su gobierno.
Benjamin Netanyahu, aseguró durante una reunión de gabinete, que su visita a Estados Unidos deja "logros enormes que pueden garantizar la seguridad de Israel durante generaciones", claro, bajo la protección de un presidente convicto.
Mas aún, y sin pudor alguno, afirmó que el plan del mandatario estadounidense Donald Trump para el futuro de la Franja de Gaza es "revolucionario". Despojarlos de sus tierras.
Netanyahu dijo que la visita a Washington fue "histórica”, y señaló que "hay oportunidades que creo que jamás habríamos soñado, o que hasta hace unos meses parecían no ser posibles, pero son posibles". Esto en km estado cada vez más proclive al sionismo.
Comentó que habló con Trump de una visión "revolucionaria" y "creativa" sobre la futura gestión de Gaza después de la guerra, que excluye tanto al grupo islamista Hamás como a la Autoridad Nacional Palestina, que gobierna en parte de Cisjordania.
El líder hebreo, investigado como posible criminal de guerra, apuntó sobre su reunión con Trump que "acordamos que los objetivos de la guerra deben completarse: eliminar a Hamás, recuperar a los rehenes, devolver a los residentes del sur y el norte (los desplazados tras el ataque del 7 de octubre de 2023 y los de los intercambios de fuego con Hezbolá desde Líbano) y por supuesto evitar que Irán consiga armas nucleares".
Según Netanyahu, el presidente Trump está "decidido” a llevar adelante la idea de que Estados Unidos controle Gaza y desplace de ahí a su población, cosa que prohíbe la Carta de Naciones Unidas.
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