A un mes de ocurrido su arresto en su domicilio en Tegucigalpa, el expresidente hondureño Orlando Hernández está ahora con un pie en el avión para ser extraditado a Estados Unidos.
Un juez de primera instancia aprobó la noche del miércoles el traslado inmediato de Hernández a la Unión Americana, donde es requerido por delitos de narcotráfico.
Esto ocurrió durante la segunda audiencia celebrada en Corte Suprema de Justicia, y en la cual se realizó la presentación y evacuación de las pruebas notificadas por la Corte del Distrito Sur de Nueva York para sustentar la acusación contra Hernández.
Entre los doc9inentos presentados se incluyó la declaración de un fiscal y de un agente de la Agencia Antidrogas.
La defensa de Hernández señaló en un comunicado que el Gobierno estadounidense "no remitió ninguna prueba fehaciente y suficiente" que involucre al exmandatario en actividades de narcotráfico, como lo exige el tratado de extradición entre Estados Unidos. y Honduras.
El Gobierno estadounidense acusa a Hernández conspiración para importar una sustancia controlada a Estados Unidos desde un lugar fuera del mismo, que incluye la fabricación, posesión y distribución de la droga; uso y porte de armas de fuego o ayudar e instigar a su uso, como ametralladoras y dispositivos destructivos, en apoyo para el tráfico de los narcóticos; así como otro relacionado con el porte de armamento
Ahora, la defensa del expresidente tendrá 3 días para apelar la sentencia ante la Corte Suprema de Justicia y evitar la extradición de Hernández arrestado el 15 de febrero para ser trasladado después a las instalaciones de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional.
Al día siguiente, se le dictó contra él prisión preventiva en función de lo establecido en el procedimiento de extradición.
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