La Fiscalía de Panamá anuncio que había presentado ya un recurso de apelación, luego del el fallo que absolvió a 28 personas imputadas por lavado de dinero en el escándalo de los "Panama Papers".
Una jueza panameña absolvió a finales de junio pasado a 28 directivos y empleados del bufete Mossack Fonseca, que fue utilizado por figuras a nivel mundial para esconder dinero en paraísos fiscales, en el caso conocido como "Panama Papers", investigación periodística publicada en varios países basada en la filtración de documentos de este despacho.
La magistrada Baloísa Marquínez también absolvió a los imputados por el caso "Lava Jato", en el que la fiscalía acusó al bufete panameño de blanquear dinero proveniente de sobornos de constructoras brasileñas como Odebrecht, a funcionarios de varios países latinoamericanos para obtener contratos.
Debido a que los delitos e imputados eran los mismos, la jueza acumuló los casos de "Panama Papers" y "Lava Jato" en una sola causa y absolvió a todos los imputados, incluído el abogado Jürgen Mossack, uno de los fundadores del bufete, liberado con sus colaboradores.
Ramón Fonseca, socio de Mossack y cofundador del bufete, falleció en mayo pasado, semanas después del fin de las audiencias del juicio.
El despacho cerró debido al escándalo, al tiempo que altos funcionarios en algunos países tuvieron que dimitir y otros fueron condenados por estas investigaciones.
El nuevo presidente de Panamá, José Raúl Mulino, dijo que el escándalo de los "Panama Papers" fue una "patraña internacional" pero no ofreció ninguna prueba de esa supuesta conspiración.
Por su parte, el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigació que divulgó los "Panama Papers", defendió su publicación, y sostuvo que "al revelar verdades ocultas, como lo hicimos con los 'Panama Papers', brindamos al público la información que necesita para exigir rendición de cuentas e impulsar reformas".
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