El jugador de fútbol americano de la NFL Aaron Rodgers está por ahora más concentrado en la situación provocada en california por los pavorosos incendios forestales que en su futuro profesional, y no tiene apuración alguna por eso.
El mariscal de campo de los Jets de Nueva York, al menos hasta la conclusión de la actual temporada en la que ya están eliminados, afirmó en el programa “The Pat McAfee Show”, que su casa en Malibú no registra daños como consecuencia de los incendios, y que apenas tuvo problemas varios días con la energía eléctrica, aunque varios amigos perdieron sus propiedades en el desastre, el cual parece controlado aunque no del todo.
Rodgers señaló que “mi hogar está bien. No estoy en las áreas afectadas, pero ha sido un momento extraño para muchos que viven aquí. Amigos míos han perdido casas. Varios amigos en Palisades han perdido sus hogares, muchos amigos en Pasadena fueron afectados... ha sido un tiempo difícil”, aseguró
A sus 41 años de edad, Aaron jugó su temporada número 20 en la NFL y su último partido fue el 5 de enero derrotando a los Delfines de Miami. Horas después, tuvo reuniones con el propietario del equipo neoyorkino Woody Johnson, el vicepresidente Christopher Johnson, el presidente del equipo Hymie Elhai y el entrenador interino Jeff Ulbrich.
Relata que 2 días después, viajó a su casa en el sur de California, donde “todo el cielo estaba oscuro y el viento estaba absolutamente loco”. La puerta se azotaba y no había energía eléctrica.”
El jugador, quien seguramente ya tiene un sitio en el salón de la Fama del fútbol americano profesional en Estados Unidos, dijo que antes de partir de Nueva York, tuvo “conversaciones agradables” con el equipo, cuyos dueños buscan contratar nuevo gerente general y entrenador en jefe. Por ahora, analizará si quiere continuar jugando y tendría que ver si los nuevos dirigentes de los Jets quieren que sea parte del equipo, en caso de que opte por regresar una temporada más.
“Les dije que me tomaré un tiempo”, dijo Aaron, precisando que “ni siquiera han tomado una decisión sobre un gerente general o un entrenador todavía”, cuando esto se de, entonces “nos llevará al siguiente paso, que será una conversación, supongo, con quien sea esa persona. Pero éste es un momento en el que estoy tomando tiempo para mi cuerpo y mi mente a fin de aclarar las cosas”, concluyó el mariscal de campo de los Jets..
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